Las cadenas solo nos dejan observar como la vida nos pasa por delante.

Cuando te percatas de que la vida puede ser mejor de lo que es, que puedes optar por más, por algo que prácticamente es tuyo, porque has sido tú el que lo ha cosechado con sus manos, manos temblorosas, sudadas, rasgadas y muchas veces mutiladas, haz sido tu el que ha tenido que soportar tormentosos y acalorados días, haz sido tu el que soporta las humillaciones, maltratos y que sutilmente se vallan apoderando de tu dignidad, pero también has sido tú el culpable de tolerar todo lo ya nombrado, haz sido tu el culpable de no ver la vida desde otra perspectiva, tu el culpable de opacar tus días, tu el culpable de aceptar el sueldo mínimo, tu el culpable de no aprender a sacar la voz, si no que solo agachas la cabeza, tu el culpable de ser pisoteado, tu el culpable de no saber ver la verdadera realidad, tu el culpable de ser un conformista. 
Si aprendieras a ver la vida NO con los ojos si no con el CORAZÓN es cuando por primera vez entenderías que llevar la nefasta vida que llevas a pesar que son muchas las cosas que te dan felicidad como tus hijxs, tu familia en general, no es vida. La vida que tú te mereces la han arrebatado a costa tuya sin poder darte cuenta. Desde los principios de nuestra historia cuando los señores y señoras eran los lideres y jefes, existían personas como nosotrxs que eran lxs esclavxs, esclavxs de un capitalismo oculto pero que era el punto g de todas las grandes jerarquías, esclavxs que al ver que usar nuestros esfuerzos para dejar feliz a un patrón o una patrona, nos respondían regalándonos comida, es ahí cuando comenzó todo, cuando nos obligaron y enseñaron a depender de las personas con poder. Han pasado millones de años y casi nadie se atreve a cuestionar la dependencia, ahora es normal ser un esclavx, pero nadie lo ve,  todxs piensan que somos trabajadorxs, pero la triste realidad es otra, somos todxs esclavxs, esclavxs de un capitalismo salvaje que nos ha obligado a ser sus títeres, títeres que con el pasar de los años los tirones a raíz de los hilos es cada vez mas doloroso.
Pero muchxs de nosotrxs hemos abierto los ojos y nos hemos dado cuenta de la realidad, nosotrxs fuimos títeres cuando nuestros padres sin saberlo nos obligaron a la dependencia y a la explotación, pero los títeres que fuimos ya no existen, por que al momento de tener conciencia sobre la vida se nos cortaron automáticamente los hilos, tomamos la decisión de escapar, de arrancar, tomamos la decisión de dejar de ser piezas de ajedrez, tomamos la orgullosa decisión de dejar de ser manipuladxs y mientras más nos vallamos uniendo mas niñxs nacerán con corazones empapados de justicia, porque nosotrxs no nos resignaremos pase lo que pase seguiremos combatiendo, combatiendo desde el interior, combatiendo desde el centro, desde el nacimiento, es así cuando se verá un cambio, cuando los miles de niñxs que nazcan sean los nuevos pingüinos que nos hagan orgullosos no por sacarse un 7 en la escuela si no por hacer valer sus derechos.
No quiero que mi hija o hijo se resigne a una vida cruel, quiero que luche por vivir una vida de verdad una vida en armonía, paz, de solidaridad y apoyo mutuo.


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